La militarización de Silicon Valley | Revista de prensa n°18
He seleccionado noticias importantes sobre inteligencia artificial durante la semana del 4 al 10 de agosto de 2025. Aquí mis comentarios.
Bienvenida/o a la decimoctava revista de prensa de Realidad artificial. Esta semana me he enfocado en el acercamiento entre las grandes empresas tecnológicas y el ejército de Estados Unidos, en la convergencia entre la vigilancia estatal y la vigilancia privada y en las 100,000 conversaciones privadas con ChatGPT que se encontraron en Google. ¡Buena lectura!
📰 Para leer
La militarización de Silicon Valley
Las grandes empresas tecnológicas de Silicon Valley, en California, han reforzado su relación con el complejo militar-industrial a lo largo de los últimos años, constata el New York Times en un artículo publicado el lunes.
El ejemplo más destacable es sin duda una ceremonia militar que tuvo lugar en Virginia, durante la cual cuatro directivos de Meta, OpenAI y Palantir se unieron oficialmente a una unidad militar llamada Detachment 201, que tiene como objetivo proporcionar asesoramiento sobre las nuevas tecnologías que pueden ser utilizadas en combate. Estos nuevos reservistas estarán activos en el ejército durante 120 horas al año y tienen el objetivo particular de enseñar a soldados a utilizar sistemas de inteligencia artificial.
“A lo largo de los dos últimos años, los líderes e inversores de Silicon Valley — quienes en su mayoría se habían rehusado a involucrarse con las armas y la guerra — se zambulleron de cabeza en el complejo militar-industrial”, explica la periodista Sheera Frenkel. Ella señala que Google, OpenAI y Meta anteriormente prohibían la utilización de la inteligencia artificial para fines militares pero después retiraron este compromiso de sus políticas corporativas, OpenAI en enero de 2024, Meta en noviembre de 2024 y Google en febrero de 2025.
OpenAI desarrolla actualmente una inteligencia artificial para sistemas anti-drones con la fabricante de armas Anduril. La empresa propietaria de ChatGPT igualmente firmó un contrato de 200 millones de dólares con el Pentágono en junio, principalmente para apoyar su defensa cibernética proactiva. Meta, propietaria de Instagram, Facebook, WhatsApp y Threads, fabrica visores de realidad aumentada para el ejército estadounidense, también con Anduril.
La startup Anthropic también se aproximó al Pentágono para lanzar a principios de junio una nueva versión de su Chatbot Claude para los militares y las agencias de inteligencia de Estados Unidos.
Leer también: El Pentágono firma contratos con cuatro compañías de IA
Las sociedades de inversión se están acercando de igual manera al complejo militar-industrial. El importante fondo de capital de riesgo Andreessen Horowitz declaró en 2023 que pensaba invertir $500 millones en sus tecnologías de defensa. Y la célebre aceleradora de startups Y Combinator, conocida por haber impulsado a Airbnb, Coinbase, Dropbox, Stripe o Twitch, financió por primera vez a un fabricante de armas en agosto de 2024. En total, las inversiones de capital de riesgo en las empresas relacionadas con la defensa crecieron fuertemente en el mundo el año pasado, con un incremento de 33% a 31 mil millones de dólares.
Una bonanza codiciada
Este acercamiento entre las empresas de la tecnología y el Departamento de Defensa se explica principalmente por un cambio político y geopolítico, según el New York Times. Líderes e inversores influyentes de Silicon Valley de hecho han apoyado posturas más derechistas desde la última carrera presidencial. Donald Trump no dejó de devolver el favor. Algunos meses después de su elección, firmó un decreto ejecutivo ordenando al ejército actualizar su sistema de adquisición de nuevas tecnologías, particularmente para acelerar este proceso. Asimismo asignó un presupuesto de $1000 billones al Departamento de Defensa en 2026, un récord. “Los líderes de Silicon Valley y los inversores codician esta bonanza con avidez”, analiza Sheera Frenkel.
A nivel geopolítico, las guerras en Ucrania y Gaza, donde los drones y los sistemas de armamento con inteligencia artificial son más utilizados, también contribuyen a la militarización de la capital tecnológica que es Silicon Valley. La competencia entre los Estados Unidos y China refuerza aún más este fenómeno.
“No muchas pausas para reflexionar”
Sin embargo, los directores e ingenieros de la tecnología están preocupados por los riesgos potenciales relacionados con este cambio. Una vez que hayan construido drones autónomos y armas de IA para el ejército, no tendrán casi ningún control sobre la forma en que estas tecnologías serán utilizadas. Se produjeron debates en Google y Meta para saber si estas armas avanzadas matarán a más personas que las armas tradicionales.
“Estas empresas de Silicon Valley son extremadamente competitivas y su ambición de entrar en estos sectores de la defensa no les deja muchas pausas para reflexionar”, comenta Margaret O’Mara, una historiadora de tecnología en la Universidad de Washington.
Un retorno a los orígenes
La militarización de Silicon Valley es un retorno a los orígenes del tecnopolo, que se desarrolló en gran medida gracias al “triángulo de hierro”, un término que definió los muy estrechos vínculos en esta región entre las universidades, las firmas privadas y el Pentágono desde los años 1930.
En los años 1950, el Departamento de Defensa comenzó a invertir en compañías de Silicon Valley para rivalizar con los avances tecnológicos de Rusia durante la Guerra Fría. El gobierno federal estadounidense se convirtió así en el primer patrocinador importante de la capital tecnológica.
Una división del Departamento de Defensa dio origen al internet en 1969. Cerca de veinte años después, en 1998, ésta cofinanciaría a dos estudiantes egresados de Stanford para crear Google.
Desde finales de los años 1990, las empresas de Silicon Valley se distanciaron del Pentágono y desarrollaron tecnologías de consumo tales como plataformas de comercio electrónico y redes sociales. Éstas mostraban entonces una imagen positiva, vuelta hacia la democracia, y contaban entre sus empleadas y empleados con numerosas personas progresistas que se oponían a cualquier colaboración con la industria de la guerra. Los tiempos han cambiado.
Siete noticias importantes de la semana
US agency approves OpenAI, Google, Anthropic for federal AI vendor list (Reuters)
A CBP Agent Wore Meta Smart Glasses to an Immigration Raid in Los Angeles (404 Media)
Home Depot and Lowe's Share Data From Hundreds of AI Cameras With Cops (404 Media)
Should big tech be allowed to mine Australians’ text and data to train AI? The Productivity Commission is considering it (The Guardian)
Nuclear Experts Say Mixing AI and Nuclear Weapons Is Inevitable (Wired)
‘AI veganism’: Some people’s issues with AI parallel vegans’ concerns about diet (The Conversation)
Lees los demás artículos de la semana que he seleccionado haciendo clic aquí.
🎥 Para ver
Una nueva era de internet
En un vídeo publicado el lunes 6, Micro habla sobre las nuevas leyes de verificación de edad que se están implementando en el Reino Unido, en ciertos países de la Unión Europea y en los Estados Unidos con el pretexto de la seguridad infantil.
Algunas plataformas, como sitios web de pornografía, YouTube, Reddit, Discord y Spotify, así como las redes sociales, ahora piden a sus usuarios que verifiquen su edad si lo exige la ley. Pueden, por ejemplo, subir una foto de su tarjeta de identificación o tener su rostro analizado por un sistema de inteligencia artificial. Las personas menores de 16 años tendrán un acceso restringido a estas plataformas o ningún acceso.
Leer también: The Age-Checked Internet Has Arrived (Wired)
Micro aborda algunos de los riesgos asociados con estas nuevas leyes, incluyendo fugas masivas de datos personales y una disminución de la privacidad de las usuarias y los usarios.
Why The Internet Really Wants Your ID... (and why now?)
Siete vídeos importantes de la semana
AI Security Warning from Signal app's Meredith Whittaker – The Hidden Dangers of Agentic AI (Content Renegade)
What happens when tech companies hold more power than governments? (Dr Myriam Francois)
Whitney Webb Sounds Alarm on Surveillance as Palantir Revenue Soars (Due Dissidence)
AI Price Gouging: Corporate Greed Is Out of Control (Vanessa Wingårdh)
Anthropic: The Worst Actor in the AI Industry? (Doom Debates)
Ves los demás videos de la semana que he seleccionado haciendo clic aquí.
🔈 Para escuchar
Cerca de 100,000 conversaciones privadas con ChatGPT en Google
En el último episodio del podcast de 404 Media, los periodistas Samantha Cole y Joseph Cox revisan una noticia reciente sobre ChatGPT y el hecho de que cerca de 100,000 conversaciones con el chatbot fueron registradas por Google. Algunas de estas discusiones aparecieron en los resultados de búsqueda de internautas, revelando información a veces sensible.
“En esta etapa, considero que casi todo lo que escribo en una pantalla puede ser potencialmente divulgado. (…) Cuando escribes algo, eso podría ir a cualquier parte. (…) La gente pone cosas insensatas en estas herramientas sobre las que no tienen ningún control.”
- Samantha Cole
Escuchar el podcast en 404 Media
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Que tengas una buena semana,
Arnaud
Gracias a Priscila Páez por la traducción de esta revista de prensa al español.